Los alcaldes de las nueve comunas integrantes de la Asociación de Municipalidades de la Provincia de Llanquihue están en alerta luego que a contar de las cero horas del pasado viernes, el sindicato de la empresa colombiana Interaseo, encargada de la operatividad del relleno sanitaria La Laja, iniciara una huelga legal.
Los manifestantes cerraron el acceso al relleno sanitario, generando aperturas parciales en diferentes momentos del día, lo que ha provocado una ralentización del proceso de descarga de los residuos domiciliarios desde los camiones recolectores, los que deben esperar su turno para entrar, en filas en el exterior del recinto.
La preocupación de las autoridades locales responde a evitar una eventual crisis sanitaria, pero a la vez se manifestaron interesados en conocer las condiciones laborales en que se desempeñan los trabajadores.
Tomás Gárate, alcalde de Puerto Varas, es el presidente de la Asociación de Municipalidades de la Provincia de Llanquihue. Consultado por la huelga en el relleno La Laja, dijo que el directorio de la entidad, acordó resguardar dos aspectos.
El primero es mantener una operación mínima del relleno para no desencadenar una alerta sanitaria. “Es algo que debemos evitar por obligación normativa”, sentencia.
Asimismo, subrayó que los trabajadores tienen el legítimo derecho de exigir mejores condiciones. “Por lo tanto también tenemos que resguardar el cumplimiento de la normativa laboral entre la empresa operadora del relleno sanitario y el sindicato”, indicó Gárate.
En ese sentido, informó que un equipo de la Asociación de Municipalidades se mantiene supervisando como observador el proceso de negociación y la operación del relleno.
Por su parte, el alcalde de Puerto Montt, Gervoy Paredes, explicó que un 65% de los residuos que llegan a La Laja provienen desde la capital regional. Por ello aseguró que “nos preocupa mucho lo que está pasando”. En esa línea anunció una visita al terreno a concretarse durante los próximos días.