El pasado jueves, los habitantes de Osorno fueron testigos de un particular fenómeno que fue visto a simple vista en el cielo.
En específico, aparecieron formas de lo que parecían ser lo que popularmente se conoce como un ovni o un platillo volador. Sin embargo, se trata de un fenómeno que se da de manera natural.
Pese a que las imágenes compartidas en redes sociales parecen sacadas de una película de ciencia ficción, los “platillos” sólo eran nubes.
El meteorólogo de Meganoticias, Jaime Leyton, indicó que se trató de “un tipo de nubosidad que se llama altocúmulo lenticular, porque su forma es parecida a una lenteja y son señal de turbulencia al menos moderada. Por tanto, es una señal visible para la aeronavegación de que las condiciones en la ruta no van a ser tranquilas”.
“Altocúmulo es el género nuboso, y el lenticular es la especie, que es como un subgénero”, sostuvo.
De acuerdo a la Organización Meteorológica Mundial, un altocúmulo es una capa de nubes blancas o grises, que normalmente están compuestas de masas redondas o rodillos, que pueden estar unidos o no.
Respecto al término lenticular el organismo indica que son “nubes con forma de lente o almendra, a menudo muy alargadas y de contornos en general bien definidos (…) Aparecen con mayor frecuencia en formaciones de nubes de origen orográfico, pero también puede observarse en regiones en las que no existe un relieve marcado”.
Leyton expuso que el fenómeno se suele “presentar en la parte previa a un frente, a un frente frío, porque la proximidad frontal comienzan a cambiar las condiciones de densidad del aire y eso hace que se desordene un poco el flujo regular y genera este movimiento desordenado, denominado técnicamente turbulencia”.
