Un joven colombiano de 19 años, en condición migratoria irregular en Chile y con residencia en Santiago, fue detenido durante un control realizado por el OS-7 de Carabineros de Puerto Montt en el peaje troncal Cuatro Vientos, en la comuna de Purranque.
El extranjero transportaba más de 3,5 kilos de clorhidrato de cocaína en una mochila y viajaba en una máquina de pasajeros que salió desde Santiago con destino a Puerto Montt.
Según cálculos preliminares, la droga incautada alcanzaba un valor superior a los 50 millones de pesos en el mercado ilegal.
En esta ocasión, los uniformados -apoyados por el can detector de drogas “Gea”- se instalaron en horas de la madrugada en el kilómetro 962 de la Ruta 5, donde comenzaron a fiscalizar diversos buses de pasajeros. Fue en ese contexto que llegó al lugar la máquina en la que se desplazaba el traficante.
Al ingresar al bus, el perro recorrió los pasillos hasta llegar al asiento del extranjero, donde marcó de inmediato la alerta. Ante ello, el personal policial solicitó al pasajero descender junto con su equipaje. Posteriormente se estableció que el individuo había abordado el bus en la comuna de Quillón, Región de Ñuble, según el registro de pasajeros
Mientras el perro “Gea” recibía su premio habitual (una pelota) tras la detección, los funcionarios revisaron la mochila del pasajero, encontrando en su interior cuatro paquetes rectangulares de color blanco, similares en tamaño a cuadernos universitarios.
Al realizar el análisis químico correspondiente, se confirmó que se trataba de 3 kilos 523 gramos y 400 miligramos de clorhidrato de cocaína.
“El can detector de drogas ‘Gea’ dio una alerta positiva a una mochila que contenía tres kilos y medio de cocaína, lo que derivó en la detención de un adulto de 19 años, de nacionalidad colombiana y en situación migratoria irregular en nuestro país”, informó el prefecto de Carabineros de Osorno, coronel Miguel Valenzuela.
El procedimiento fue reportado al fiscal de la macrozona, quien ordenó diligencias para establecer la procedencia y destino de la droga. Además del estupefaciente, se incautaron equipos celulares y dinero en efectivo.
Durante la audiencia de formalización en el Juzgado de Garantía de Río Negro, la defensa del imputado alegó que la detención era ilegal, argumentando la ausencia de un acta escrita de lectura de derechos. Sin embargo, el tribunal determinó que la lectura verbal era suficiente y declaró ajustado a derecho el procedimiento.
Posteriormente, el fiscal Daniel Díaz formalizó cargos por tráfico ilícito de drogas.
“En el segundo nivel del bus, en el asiento 19, el can alertó de manera positiva.
Se procedió a efectuar un control de identidad investigativo al ciudadano colombiano y, al revisar su equipaje, se encontraron cuatro paquetes rectangulares envueltos en papel transparente con una sustancia polvorienta de color blanco.
La prueba de campo arrojó positivo para cocaína, por lo que se materializó la detención”, indicó en la audiencia.
El Ministerio Público solicitó la medida cautelar de prisión preventiva para el colombiano, sosteniendo que su libertad representaba un peligro para la seguridad de la sociedad en el país y la salud pública.
El fiscal expuso además que el detenido no registra una conducta intachable, pues cuenta con una condena reciente por tráfico de drogas, dictada el 4 de julio de 2025, que lo sentenció a tres años y un día de presidio más una multa de 20 UTM.
Si bien cumplía la condena bajo el beneficio de libertad vigilada intensiva, reincidió en el delito.
A juicio del fiscal, el éxito de la investigación dependía de mantener al imputado privado de libertad, lo que fue acogido por el juez de Garantía, quien decretó su ingreso a la cárcel de Osorno y fijó un plazo de investigación de 120 días.

