El juez del Tribunal Oral en lo Penal de Puerto Montt condenó a un hombre a presidio perpetuo calificado por el crimen de su hija de 45 días de vida y por agredir brutalmente a sus otros dos hijos lactantes. La sentencia implica que el condenado deberá cumplir un mínimo de 40 años de reclusión efectiva antes de optar a algún beneficio carcelario.
La investigación reveló un patrón de violencia reiterada contra los menores, incluyendo fracturas y traumatismos graves. La bebé fallecida sufrió un grave traumatismo craneoencefálico y múltiples fracturas en distintas etapas de sanación. Su hermana gemela sobrevivió, pero también fue víctima de maltrato severo.
La fiscal del caso destacó que la pena impuesta es la máxima contemplada por la legislación chilena y que se logró demostrar la reiteración de la conducta y la especial brutalidad con que el hombre actuó contra sus hijos. La condena es considerada histórica y refleja la gravedad de los hechos cometidos.
